Rabat, 22 oct (EFE).- El presidente de la Real Federación de Fútbol de Marruecos, Fouzi Lekjaa, afirmó en una entrevista con EFE que los jóvenes futbolistas marroquíes reúnen las condiciones para asentarse definitivamente entre las grandes potencias del fútbol mundial, "sin complejos", como fruto de un ambicioso proyecto de desarrollo que lleva más de 17 años en marcha.
El país magrebí consiguió un nuevo hito futbolístico el pasado domingo cuando el equipo nacional se proclamó campeón de la Copa del Mundo juvenil Sub-20 en Chile al imponerse a Argentina, seis veces campeona en esta disciplina.
Los "cachorros del Atlas" fueron recibidos este miércoles por el príncipe heredero Mulay Hassan en el Palacio real antes de darse un baño de masas en el centro de Rabat, donde miles de aficionados se congregaron para acompañar el paso de los campeones del mundo en un autobús descubierto.
Para Lekjaa, la clave del éxito de Marruecos está en la "visión y estrategia" marcada por el rey Mohamed VI, que no solo tiene como objetivo la modernización de las infraestructuras deportivas sino el desarrollo del propio jugador con un cambio de mentalidad.
"Es una mentalidad para estar entre los grandes y buscar títulos a nivel mundial. Este es el objetivo y el principio. Nuestros jóvenes ya no tienen complejos, saben que están en las mejores condiciones para tener un alto nivel y que los pequeños detalles tecnológicos y de rendimiento están controlados", agregó.
"Hoy en día, reunimos todos los recursos y las condiciones para asentarnos definitivamente entre los grandes del fútbol", insistió.
La hazaña del combinado juvenil se suma a otros logros del fútbol marroquí en los últimos años, cuando la selección absoluta quedó en cuarto puesto en el Mundial de Catar de 2022, o el triunfo en la copa africana Sub-23 y Sub-17, y el bronce en los olímpicos de París de 2024.
"Es un ecosistema que impulsa hacia arriba y el resultado de esta estrategia comienza a dar frutos a nivel mundial (...)", afirmó Lekjaa, quien subrayó que esta visión fue concebida y "estratégicamente diseñada y ejecutada" por el rey Mohamed VI que empezó hace 17 años, con la inauguración de la Academia de Fútbol que lleva su nombre.
La Academia Mohamed VI, inaugurada en 2009 y financiada por el monarca, constituyó un "punto de inflexión" en la historia del fútbol marroquí, según Lekjaa.
Esta institución acoge a jóvenes seleccionados tras un riguroso proceso para recibir una formación deportiva intensiva de cinco años. De sus filas han salido talentos que brillaron en el Mundial de Catar, como Azzedine Ounahi, Nayef Aguerd o Youssef En-Nesyri.
Y de este centro de entrenamiento han salido también destacados jugadores que fueron titulares en la final de Mundial Sub-20 ante Argentina como Fouad Zahouani, Hossam Essadak, Yassine Khalifi, y Yassir Zabiri, autor de los dos goles contra los Albicelestes y ganador del Botín de Plata del campeonato.
Hoy, continuó Lekjaa, los futbolistas marroquíes acuden a las citas internacionales con una mentalidad ganadora, y con la misma actitud afrontarán la próxima copa africana, el Mundial de 2026 en Estados Unidos, Canadá y México, o el Mundial de 2030, que el país magrebí organizará conjuntamente con España y Portugal.
"Hoy en día, cuando una selección nacional disputa un campeonato continental o internacional, solo tiene un objetivo: ganar", subrayó.
"Claro que no ganaremos todos los títulos, pero siempre estaremos entre los ocho, seis o cuatro finalistas en todas las categorías. Estuvimos entre los cuatro finalistas en el Mundial de Catar y la lógica nos dicta que busquemos jugar una final, si no ganarla".
"Después de cuatro años, no vamos a volver atrás, buscaremos consolidar estos resultados positivos. En cualquier caso, en el ecosistema futbolístico no censuramos la ambición; es abierta y buscamos alcanzar el máximo nivel", reiteró.
Fatima Zohra Bouaziz