Alex Márquez llega a un circuito de Sepang que le puede dar bastante rédito. El piloto español está en posición de asegurar ya este fin de semana en Malasia el subcampeonato del mundo de pilotos de MotoGP, al contar con una ventaja de 97 puntos sobre el tercer clasificado, Marco Bezzecchi, cuando quedan 111 en juego en tres grandes premios (necesitaría salir de la gira asiática con un colchón de 74).
Resulta algo factible, al ser el Circuito Internacional de Sepang uno de los favoritos del #73. Lo ha sido históricamente y lo fue también en pretemporada, donde brilló con luz propia y fue uno de los corredores más dominadores, en cuanto a la tabla de tiempos se refiere. El propio piloto español lo recordó este jueves, en su llegada a la pista, al atender a los medios de comunicación, entre los que se encontraba Motorsport.com.
El pequeño de los Márquez Alentà empezó diciendo que arriesgará con todo para ganar en este GP de Malasia si siente que existe esa posibilidad: "Creo que tenemos una ventaja suficiente [para ser subcampeón], hay que hacer creo que 14 o 15 puntos, solamente, en las tres carreras que quedan. Entonces, cuando me sienta para arriesgar, voy a hacerlo. Es verdad que en Australia el límite siempre cuesta más de controlar, y decidí asegurar un poquito al final de la carrera. Pero aquí, si al final tenemos el nivel que teníamos en la pretemporada, que íbamos muy rápidos y muy constantes, y está la posibilidad de ganar, pues por supuesto que voy a arriesgar por ello".
"Aquí siempre he ido muy rápido. En 2023, gané la sprint e hice segundo en carrera larga. Es un circuito que se me da muy bien. Pero este fin de semana tendremos el hándicap del tiempo, yo creo que va a llover en alguna sesión, habrá que estar atento en esos momentos y eso no juega a nuestro favor. Un fin de semana completamente en seco podría favorecernos a nosotros", siguió.
Sin embargo, Alex Márquez también quiere medir el potencial de las marcas respecto a la pretemporada, con una Ducati GP24 que no ha mejorado frente a otras motos que sí lo han hecho: "Pero también será interesante, porque creo que el test de pretemporada no hacía relucir todo el potencial de todos los pilotos y de todas las fábricas. Porque muchas habían cambiado, aquí aún estaban como empezando el proyecto. Será interesante ver cómo han mejorado Yamaha, Honda, KTM y Aprilia, para ver dónde estamos, porque nosotros tenemos exactamente lo mismo, no tenemos nada nuevo o mejor. Será interesante ver cuánto de cerca están".
Posteriormente, el de Gresini Racing fue cuestionado sobre si siente que el resto de motos están verdaderamente más cerca, por más de que la ausencia de Marc Márquez juegue un papel clave, después de que la Aprilia se haya mostrado como la referencia en los dos últimos fines de semana, con Bezzecchi desperdiciando la victoria en Indonesia pero Raúl Fernández alcanzándola en Phillip Island hace unos días.
Para Alex, efectivamente los rivales han acortado diferencias, pero pelear contra Ducati y su hermano durante toda una temporada completa es una historia mucho más difícil de afrontar: "Creo que los que están más cerca ahora mismo por supuesto son las Aprilia. Lo mejor que tiene Ducati es que, en fines de semana donde sufrimos muchísimo, como en Indonesia, te acaba ganando Fermín Aldeguer. En Australia estuvimos muy cerca de la victoria. Entonces, quieras que no, tenemos una moto muy competitiva, muy puesta a punto, donde lo tienen muy claro en Ducati para 22 carreras, que eso es lo importante".
"Entonces, es verdad que habrá fábricas que creo que en este momento nos pueden poner las cosas muy difíciles en muchos fines de semana, pero no sé si aún hay una moto preparada como para, en 22 carreras, sobre todo luchar contra un tío como es Marc, si eso aún ha llegado. En Ducati no se duermen, siguen trabajando y quieren mejorar, porque es así, al final [el resto] están cerquita. Pero confío en que Ducati el año que viene dará un pasito más. No hay que perder, sobre todo, una moto competitiva en 22 grandes premios", siguió.
Por último, Alex actualizó la situación de su hermano Marc: "La verdad es que no le pregunto mucho cómo está, le dejo hacer. Está bien, animado, dentro de lo que cabe. Me da bastante la turra con cosas que ve y que deja de ver. En Australia, me decía cada día que levantarse tan pronto era duro, porque no se perdió ni un entreno y quería estar ahí pendiente. Está tranquilo, que es lo más importante. Tiene sobre todo la experiencia del pasado, sabe que no tiene que tener prisa, volverá cuando esté preparado al 100 por 100", concluyó.