El presente de Aston Martin en el Mundial de F1 es preocupante. La escudería de Silverstone es, de momento, la gran decepción de 2025. El AMR25, un monoplaza concebido por Dan Fallows en el túnel de viento de Mercedes en Brackley, sigue sin estar a la altura de las expectativas.
La escudería británica es la cuarta peor en la clasificación de constructores, con sólo 14 puntos. Y mientras la temporada avanza cuesta arriba, la esperanza de Fernando Alonso parece estar en el circuito de Imola y en un nombre en concreto: Adrian Newey.
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Aston Martin y las razones para creer que las mejoras de Imola para el AMR25 de Fernando Alonso funcionarán
F1
Aston Martin atraviesa una temporada 2025 difícil, con un AMR25 que no ha logrado consolidarse como un coche competitivo. El monoplaza ha mostrado carencias estructurales claras, sobre todo en curvas lentas, como ha incidido Fernando Alonso durante las primeras carreras del Mundial de F1 2025.
De hecho, desde Italia se informa que una vez calibrada la maqueta del monoplaza de 2025 en el flamante nuevo túnel de viento en Silverstone, los ingenieros de Aston Martin realizaron varias simulaciones aerodinámicas cuyo números no casaban con los extraídos en la instalación de Mercedes.
Una disparidad en las cifras que provocó que Adrian Newey, de manera indirecta, impulsase un profundo cambio en la metodología interna del equipo verde.
"Se unió en marzo, por lo que hubo un período para que se pusiera al día con las regulaciones y con el trabajo conceptual que habíamos estado haciendo en los meses anteriores. Y hay algunos plazos estrictos que cumplir para publicar los detalles del monocasco y de la transmisión. Todo es nuevo, no hay remanentes, así que hay mucho trabajo ahí y Adrian se ha centrado en eso", explicó Andy Cowell.
"Es valioso que Adrian Newey comprenda las herramientas que tenemos; la fidelidad, la precisión con la que predicen lo que sucederá en la pista. Con los métodos, las herramientas y el enfoque adoptados para analizar e interpretar los datos, y priorizar lo que se considera más adecuado para crear un coche que pueda ir más rápido por la pista", afirmó el CEO de Aston Martin.
Esta es la base sobre la que se construyen las esperanzas de que las próximas mejoras, previstas para Imola, consigan resultados inmediatos y aumenten la velocidad del AMR25 de Fernando Alonso y Lance Stroll. Aunque se dice que Newey quedó impresionado por las nuevas instalaciones en Silverstone, Cowell reconoce que aún hay margen para evolucionar.
"Adrian Newey elogia enormemente el campus y se muestra positivo respecto al túnel que tenemos y a la manera en que está todo organizado. Por supuesto, él nos presiona para que mejoremos la forma en que operamos en el túnel, la forma en que operamos con CFD, la forma en que operamos con simulaciones de vueltas. Prácticamente todo lo que Adrian tiene ideas sobre cómo mejorar", apuntó Andy Cowell.