A Manu González le toca rehacerse tras el Gran Premio de Malasia. El piloto español ha ido perdiendo la ventaja que tenía al frente de la general de Moto2, sobre todo por la descalificación en Indonesia, hasta ceder el liderato a Diogo Moreira este pasado domingo en el circuito de Sepang.
Y eso que el corredor del Dynavolt Intact GP marchaba por delante de su rival brasileño en la antepenúltima prueba del curso. Pero todo se torció justo antes de comenzar la penúltima vuelta, cuando González, yendo detrás de Barry Baltus, se fue al suelo en la parte final de la pista, sumando un cero demoledor mientras que Moreira cruzó la línea de meta en quinta posición, acumulando 11 puntos.
Tras la carrera, González explicó en DAZN lo sucedido, y achacó la caída a problemas con el neumático delantero, que ya venía sufriendo durante todo el fin de semana, y que se agudizaron al no cambiar el compuesto usado a uno nuevo tras la bandera roja, que se mostró por caída de Joe Roberts y obligó a iniciarlo todo de nuevo.
"He tenido un poco de mala suerte en la segunda vuelta, que casi me toco con Albert Arenas y he perdido dos posiciones. Luego, a partir de ahí, he intentado remontar poco a poco. No me sentía mal con la moto, pero al intentar adelantar a Barry Baltus, ya se me ha cerrado de delante una vez. Y a partir de ahí, iba sufriendo mucho con el neumático delantero", empezó diciendo.
"En la bandera roja, hemos cambiado solamente el neumático trasero, y parece que ha perjudicado un poco a la goma delantera. También era un problema que llevábamos sufriendo todo el fin de semana, se me cerraba un poco de delante. Ya lo vi el viernes, en la salvada que hice justamente en esa curva. Iba con cuidado en esas vueltas, porque sabía que quedaba poco. Había que tener cuidado en la entrada en curva, e intentaba cambiar un poco el estilo de pilotaje para que no pasara justo eso. La caída ha sido una sorpresa, por intentar estar cerca de Baltus. Una pena. Todavía quedan dos carreras, 50 puntos, y lucharemos hasta el final", siguió González, prometiendo lucha de cara al final del curso.
'ManuGass' también detalló cómo fue correr después de MotoGP, debido a lo sucedido en Moto3 con Rueda y Dettwiler, y tener que disputar una prueba a 11 vueltas tras la bandera roja: "Ha cambiado las condiciones de la pista, y la verdad es que en la primera salida me sentía muy bien. También en la segunda, en las primeras vueltas. Habíamos arreglado lo que nos costaba durante el finde, con neumático nuevo, pero parece ser que empeoramos con goma vieja. Una pena esta caída, pero he dado lo que tenía. Estoy contento por eso, porque daré todo, al 100 por 100, en todo lo que queda de Mundial".
Con todo y con esto, a González le separan 9 puntos de Diogo Moreira, por lo que depende de sí mismo aún: si gana en Portugal y en Cheste, será campeón. Por eso, no le pierde la cara a la pelea por el título, y se mantiene motivado, sabedor de que puede plantar cara: "Todavía está todo en juego, hemos perdido esta carrera, pero tenemos la moral alta. Portimao y Valencia se me dan bien, así que iremos a muerte, y ya está. Habrá que ir a ganar las dos carreras, y ya está", cerró.