Actualmente, casi todos los equipos de F1 cuentan con un programa júnior y una academia que llega incluso al karting para descubrir al próximo gran talento al volante. Fuera de la pista, una carrera similar está en marcha con programas de graduados y planes de aprendizaje en expansión, ya que los equipos buscan renovar su plantilla con jóvenes talentos.
Uno de los objetivos es adelantarse a los otros diez equipos para fichar a los mecánicos e ingenieros más brillantes y apasionados. El otro es reemplazar al personal que viaja a la mayoría —si no a todas— las 24 exigentes carreras del calendario antes de que la vida familiar o el deseo de un cambio de ritmo o de puesto los lleve de vuelta a un rol en fábrica o incluso a otro sector.
El equipo Aston Martin se ha aliado con su socio de lubricantes Valvoline para apoyar su Aspiring Mechanics Programme, que destinará un fondo de un millón de dólares durante cinco años para ayudar a unos 10.000 jóvenes mecánicos a través de becas y formación. Valvoline participa porque la búsqueda de la próxima generación de mecánicos no se limita al mundo de la F1: la empresa estima que la industria automotriz global enfrentará una escasez de 4,3 millones de trabajadores cualificados de aquí a 2030.
El lanzamiento de este programa mundial tuvo lugar durante la semana del Gran Premio de México, donde miembros del equipo Aston Martin Racing se reunieron con estudiantes de la Escuela Mexicana de Electricidad, ocho de los cuales recibieron becas.
Motorsport.com estuvo presente y pudo ver cómo los cerca de 50 estudiantes escuchaban con atención cada palabra de Miguel Faísca, miembro del equipo Aston Martin, mientras explicaba las exigencias y el atractivo de trabajar en la Fórmula 1. Los estudiantes pudieron manipular planos técnicos y piezas del monoplaza de Aston Martin antes de bombardear a Faísca con preguntas. Los ocho ganadores de las becas —dos de ellos mujeres— fueron invitados el viernes a visitar el paddock y el garaje del Autódromo Hermanos Rodríguez.
"Esto es lo mejor que hay; si esto no los inspira, ¡nada lo hará!", bromeó Andy Stevenson, veterano director deportivo de Aston Martin. Stevenson comenzó su carrera en la F1 como mecánico hace 35 años, cuando entró en el equipo Jordan en 1991 tras haber sido mecánico del propio Eddie Jordan en F3.
"Tuve mucha suerte de entrar en este deporte, porque me ha dado una enorme satisfacción, y todo gracias a ser mecánico. Me ha definido la vida, me ha permitido conocer a gente muy interesante y viajar a lugares increíbles. Es una oportunidad fenomenal para estos estudiantes. [No puedo imaginar] si yo hubiera tenido esa oportunidad de niño, en vez de tener que colarme bajo las vallas de Thruxton para ver correr a alguien en un coche de F3 un día de lluvia…"
A pesar de ser un hombre de F1 de toda la vida, Stevenson no endulza la dura realidad de ser mecánico de F1: 24 carreras más test, jornadas largas, alta presión y muchos vuelos en clase económica. Por eso encontrar a las personas adecuadas, con verdadera pasión, es tan importante.
"Ser mecánico de Fórmula 1 implica muchísimo trabajo duro", reconoció. "Hay que tener una enorme dedicación, porque hay muchos sacrificios que hacer. Pero las recompensas son fenomenales. Incluso hoy, cada carrera me sigue dando una enorme satisfacción y disfruto muchísimo con lo que hacemos".
Pese a un calendario cada vez más amplio, Stevenson asegura que los equipos de F1 han mejorado en la retención de personal.
"La gente se queda más tiempo", explicó. "El equipo de carrera que tenemos ahora no ha cambiado en los últimos cuatro o cinco años. Eso antes no pasaba. Creo que es porque ahora somos empresas más profesionales. Entendemos los problemas de la vida y ofrecemos más apoyo a nuestra gente".
Aun así, atraer a la próxima generación sigue siendo un gran reto, ya que muchos mecánicos acaban optando por un ritmo de vida distinto. Una de las formas en que la colaboración con Valvoline intenta aliviar la escasez de talento es ampliando el grupo de candidatos potenciales.
Los jóvenes mecánicos en México o en otras partes del mundo podrían pensar que trabajar en F1 no está a su alcance y que es un sueño lejano. Este programa pretende demostrar lo contrario.
"Para nosotros es extremadamente importante, porque ninguno de nosotros se hace más joven, y tenemos a mucha gente en el garaje que se está casando, formando familias, y comprometerse con toda la temporada de carreras es muy difícil", explicó Stevenson.
"Por eso necesitamos sangre nueva, y este programa es fantástico, porque nos permite ver a estos chicos jóvenes desde el principio y orientarlos en la dirección correcta. Abre una gran reserva de talento que antes no estaba disponible".
"Creo que muchos jóvenes, cuando ven la F1 por televisión, piensan que nunca podrían hacer eso. Esta iniciativa les permite decir: ‘En realidad, sí hay una oportunidad, y puedo hacerlo’. Siempre estamos buscando buen personal. Es difícil encontrarlos, porque exigimos un nivel muy alto, pero esto significa que habrá más gente preparada".
Otro obstáculo es el límite presupuestario de la F1, que impide a los equipos destinar recursos ilimitados a salarios. También los obliga a captar talento antes incluso de que se gradúe, para adelantarse a la competencia y formarles fuera del entorno directo de la F1.
"El límite presupuestario nos ha atado un poco las manos a la hora de incorporar a mucha gente, porque tenemos que incluirlos en el tope desde el principio", añadió Stevenson. "Tenemos un programa en Silverstone llamado F1 Evolution, en el que usamos nuestros coches antiguos".
"Buscamos contratar a jóvenes allí, para formarlos fuera del límite presupuestario, y cuando están listos los incorporamos al equipo. También ofrece una opción para que, cuando alguien ya no quiera hacer todas las carreras, pueda regresar, compartir su experiencia y ayudar a formar a los nuevos".
Gustavo Schmidt, vicepresidente de operaciones globales de Valvoline para Latinoamérica, espera que el exitoso inicio de la iniciativa de mecánicos en México pueda repetirse en otros países.
"Estamos muy orgullosos de lanzar el programa aquí en México, pero la intención es expandirlo al resto del mundo para impactar a miles de mecánicos mediante becas, formación y herramientas", afirmó Schmidt.
"Llevar a los estudiantes al circuito para visitar el garaje y conocer a la gente es una experiencia increíble que los inspira. Andy es un gran ejemplo, y su colaboración nos ayudará a lograr muchas más historias como la suya".
