¡Disfruta del mejor fútbol en DAZN!
Han pasado 12 años desde que Alexia Putellas jugó su primera Eurocopa.
12 años en los que ha pasado de ser una joven jugadora que empezaba a hacerse hueco entre las mayores a convertirse en uno de los iconos más grandes del fútbol femenino.
"Veo el fútbol como un todo, todos iguales. Al principio me costaba gestionar la atención. Era muy introvertida. Y cuando empezaron a llegar los premios individuales, pensaba: 'No lo entiendo", confesó en una entrevista con The Guardian.
Pasaron los años y Alexia lo ganó todo, tanto con el Barça como individualmente, convirtiéndose en la primera futbolista española en ganar dos Balones de Oro seguidos: "Con el tiempo, llegué a sentir: 'Bueno, te han puesto ahí, el destino te ha querido ahí: úsalo'. Mucho de lo que hice no fue por mí, sino para que el fútbol creciera".
Ahora, llega a la Eurocopa de 2025 tras perderse la anterior, en 2022, tras sufrir una rotura de ligamento cruzado anterios a escasas horas del debut en la competición.
Leer más | Conoce la convocatoria de Montse Tomé para la Eurocopa de 2025
RFEF
En la Eurocopa de 2025 se cerrarán muchos círculos. Uno de ellos, el del regreso de Alexia Putellas a la competición que se perdió tras romperse el cruzado en el momento más cruel: a las puertas del debut de España en la Eurocopa de 2022.
Han pasado tres años en los que la capitana del Barça y de la Selección ha tenido que lidiar con todo tipo de situaciones, tanto dentro del campo como fuera.
"Intentas decirte a ti misma: 'Es genial, acabamos de ganar el Mundial', pero ves a la prensa, a la gente, todo, y la atención no está ahí. Fue una situación de mierda, desagradable, una carga", recordó en la entrevista con el medio inglés, sobre el Mundial que España ganó.
Pero, echando la mirada más para atrás, su recuerdo se estanca en la Eurocopa de 2022: "No era la rodilla lo que me dolía, era el alma ¿Conoces esa sensación, esa seguridad que sientes cuando eres capaz de todo? En ese momento, lo sentí. Y ahora vuelvo a sentirlo".
"Estoy feliz; tengo muchísimas ganas de jugar esta Eurocopa. Tengo muchas ganas de empezar, de ir y darlo todo", avisó en la charla.
Cada vez que recuerda aquel entrenamiento en el que sufrió la lesión, confiesa que supo en el momento lo que le había pasado: "Oí un sonido como el de una rama al romperse. 'No, ahora no'. Nunca lo esperas, pero en ese momento. Es el día anterior...".
Las días y semanas posteriores fueron aún más complicados, además, recibió la noticia de que podría volver a caminar en un mes: "Al principio no hay nada. Solo dolor. Y sentía mucho dolor. No podía dormir. No tenía apetito. Era un círculo vicioso. Incluso para moverme".
Cuando volvió a jugar, confesó en The Guardian, sintió frustración "porque tu último recuerdo jugando era así y ahora no puedes dar un pase, no puedes girar, no puedes controlar": "Hay momentos en los que te preguntas si alguna vez lo lograrás".
"Te advierten que el día que recibes el alta médica y vuelves a jugar, aún no está todo hecho: necesitas tiempo, adaptación, competencia. No pienses que volverás a ser el mismo; eso no es real. Todavía tienes tres o seis meses. Tienes que intentar darte ese margen, controlar tus emociones. Y justo en medio de ese período está el Mundial", añadió.
Años después de aquello, Alexia es consciente de que su nivel es "completamente diferente": "Físicamente no eres el mismo que antes. También están pasando cosas. Llegué con confianza; luego llegó la derrota contra Japón y me cortaron la cabeza".
Al ser preguntada por si se sintió señalada en la derrota antes las niponas en el Mundial, dijo que no: "Entiendo que si las cosas no van bien, el entrenador tiene que cambiar a alguien, y fui yo, y punto".
Después del proceso de recuperación, Alexia cerró una etapa marcando el 0-2 en la final de la Champions femenina de 2024 ante el Olympique de Lyon en San Mamés: "Hay un momento en el que me siento liberada, y ese es Bilbao".
"No es que saliera del campo ese día pensando: "Puedo hacerlo", sino: "Ya está", "ya llegó el momento". El ligamento cruzado, el menisco, toda la lesión: cerraste el ciclo. Listo. Me sentí libre. Y a partir de ahí, me he sentido superbien", dijo al medio británico antes de partir a Suiza.
"Creo que esta Eurocopa será única, es el trofeo que nos falla y creemos que podría serlo ahora, pero nos enfrentamos a muy buenos equipos", finalizó.