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Omari Jones empieza a cumplir con las expectativas que lo señalaban como una de las grandes promesas del boxeo estadounidense. Con apenas 22 años y un brillante pasado amateur, el medallista de bronce olímpico en París 2024 afronta este sábado el combate más exigente de su corta carrera profesional.
El invicto peso superwélter se enfrentará a Yusuph Metu (12-2, 9 KOs) en un duelo a seis asaltos en el Caribe Royale de Orlando, su ciudad natal. El evento forma parte de la velada encabezada por el enfrentamiento de peso pesado entre Lenier Pero (12-0, 8 KOs) y Jordan Thompson (15-1, 12 KOs), transmitida en directo por DAZN.
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Para Jones (3-0, 3 KOs), la cita tiene un valor doble: consolidar su ascenso y hacerlo ante su público. “Este es, sin duda, el examen más difícil de mi carrera”, reconoció a The Ring. “Metu es un rival con mucha experiencia. Tiene 12 victorias, no ha sido noqueado y ha llegado al límite en peleas de diez asaltos contra boxeadores invictos. Estoy preparado para el reto”.Matchroom Boxing
El tanzano llega en buena forma tras su nocaut en el primer asalto ante Mainya Ramadhan el pasado 19 de julio. Antes de ese triunfo, Metu había encadenado dos derrotas ajustadas a la distancia frente a Anthony Velazquez (18-0-1, 15 KOs) y Albert Khamkhoev (12-0, 5 KOs), ambos invictos. Con 32 años, busca recuperar el impulso con el que arrancó su carrera (diez victorias seguidas) antes de caer en dos de sus últimos cuatro combates.
Omari Jones, por su parte, ha mostrado una contundencia que respalda la confianza que el entorno del boxeo estadounidense tiene en él. Debutó en marzo de 2025 precisamente en el Caribe Royale, donde detuvo en el segundo asalto a Alessio Mastronunzio (14-6, 4 KOs). En julio, su tercera pelea profesional se saldó con una victoria fulminante: derribó dos veces al argentino Alfredo Rodolfo Blanco (24-15, 11 KOs) antes de finalizarlo con un golpe al cuerpo en el tercer round.
Hasta ahora, ninguno de sus rivales ha logrado llevarlo más allá del tercer asalto. Sin embargo, Jones es consciente de que este sábado podría ser distinto. “Metu ha ido a la distancia con muchos veteranos, así que estoy preparado para pelear los seis asaltos si hace falta”, aseguró.
El estadounidense confía en su preparación y en el impulso de pelear frente a sus seguidores. “Empecé a entrenar una semana después de mi última pelea”, explicó. “Llevo tiempo esperando esta noche. No hay mejor lugar para hacerlo que en mi casa. He vendido muchas entradas, y sé que va a ser un espectáculo increíble”.
Con apenas tres combates profesionales, Jones avanza con paso firme, respaldado por su talento y su disciplina. Su estilo técnico, su potencia en los golpes al cuerpo y su temple dentro del ring han despertado comparaciones con figuras como Shakur Stevenson o Keyshawn Davis, exponentes de la nueva generación del boxeo estadounidense.
El sábado será una prueba importante para confirmar que el salto al profesionalismo no le pesa. De superar con éxito a Metu, Omari Jones podría consolidar su posición como uno de los prospectos más prometedores de la división superwélter, en un escenario ideal: su ciudad, su público y una plataforma global como DAZN.
“Prometo dar un gran espectáculo”, concluyó el joven talento. “Este es solo el principio. Quiero que la gente recuerde esta noche como el momento en que empezó todo”.